Las tarjetas de crédito, hoy en día, son una parte inevitable de la vida adulta. Sin embargo, pueden ser muy intimidantes si no sabes bien cómo funcionan. De hecho, hay personas que ni siquiera saben cómo solicitar una tarjeta de crédito.
En cuanto a las tarjetas de crédito, existen muchos mitos y estigmas. Por esta razón, parte de la población trabajadora termina evitando su uso. No obstante, no utilizar tarjetas de crédito podría ser un error.
Esto se debe a que, si se usan correctamente, las tarjetas de crédito ofrecen una gran cantidad de beneficios. Una tarjeta de crédito te permite pedir dinero prestado al banco e incluso obtener algunas recompensas a cambio. Para aprender a solicitar una tarjeta de crédito, sigue leyendo.
Tipos de tarjetas de crédito
La idea básica de una tarjeta de crédito es ofrecer al titular una línea de crédito. Sin embargo, existen muchos tipos diferentes de tarjetas de crédito que cumplen con este propósito.
Transferencia de saldo
En primer lugar, existe la tarjeta de crédito para transferencia de saldo. La principal ventaja de esta tarjeta suele ser la posibilidad de transferir saldos de otras tarjetas aprobadas con una tasa de interés del cero por ciento.
Te permite trasladar deudas de alto interés de otras tarjetas a una nueva, con tasas de interés equivalentes bajas o incluso cero.
Bajo costo
Las tarjetas de crédito de bajo costo resultan atractivas para los clientes, ya que normalmente ofrecen tasas de interés favorables durante el primer año de uso. Por favor, revisa los términos y condiciones de la oferta para saber si/cuándo comenzarán a aplicarse las tarifas regulares.
Recompensas
Con una tarjeta de crédito con recompensas, los usuarios reciben beneficios cada vez que utilizan esta forma de tarjeta de crédito. Esto puede ser a través del programa de puntos de recompensa de tu supermercado local u otro establecimiento. Básicamente, los titulares de la tarjeta acumulan puntos por cada compra realizada con su tarjeta.
También existen tarjetas de crédito con devolución de dinero, en las que mientras más uses tu tarjeta, más dinero recibes. Recibirás una compensación en efectivo diferente según un mínimo de compra especificado.
Empresarial
Algunas tarjetas se han diseñado con recompensas únicas que se adaptan mejor al tipo de clientes en cada nicho (empresas o estudiantes). En cuanto a las características, básicamente son iguales a las de una tarjeta de crédito normal.
Sin embargo, se diferencian por los tipos de ventajas y aplicaciones que incluyen. Por ejemplo, las tarjetas de crédito empresariales son el tipo de tarjetas adecuadas para el uso en negocios.
Aparte de separar los gastos del personal de los de la empresa, suelen ofrecer beneficios e incentivos específicos para compañías, límites de crédito más altos, reportes de control de nómina (para seguimiento), y la posibilidad de emitir tarjetas adicionales para los empleados.
Estudiante
Las tarjetas de crédito para estudiantes son mucho más comunes en el extranjero. Funcionan como una tarjeta de crédito de "inicio" para estudiantes que, por lo general, todavía no reúnen los requisitos para una tarjeta de crédito convencional.
Por lo general, están diseñadas para que los universitarios puedan financiar gastos relacionados con sus estudios y, al mismo tiempo, comenzar a construir un buen historial crediticio.
Una vez que hayas elegido la tarjeta adecuada para tu estilo de vida, el siguiente paso es solicitarla.
Solicitar una Tarjeta de Crédito
Primero, verifica tu calificación crediticia. Conocer tus puntuaciones de crédito y lo que aparece en tus informes financieros te ayudará a decidir a qué tarjeta te conviene aplicar.
Por ejemplo, si tienes mal historial crediticio, quizá no te convenga solicitar una tarjeta de crédito premium, especialmente si se indica explícitamente que solo se aprobarán solicitudes de quienes tengan una puntuación sobresaliente.
Luego, puedes elegir dónde solicitarla. ¿Tienes aún una cuenta corriente o de ahorros en un banco o cooperativa de crédito? Solicitar una tarjeta con una institución financiera donde ya tienes historial puede ser una buena idea porque tienes una trayectoria bien establecida.
Revisa los costos y beneficios que te ofrecen. Identifica qué tipo de tarjeta se adapta mejor a ti. Elige según sus tasas de interés y los distintos beneficios que cada compañía proporciona antes de tomar una decisión.
Cuando estés listo para solicitar, puedes acudir a la sucursal más cercana del banco o ingresar a su sitio web. Deberás completar diversos datos personales y financieros para finalizar tu solicitud. Ten en cuenta que el emisor realizará una revisión exhaustiva de tu historial crediticio.
Conclusión
Por lo general, cuando solicitas una nueva tarjeta de crédito, se realiza lo que se conoce como una consulta dura en tus informes de crédito. Esto puede afectar tu puntaje crediticio, por lo que es recomendable solicitar solo una tarjeta de crédito a la vez.
